El bloqueo de las arterias coronarias puede dar lugar a producir una angina de pecho, un infarto de miocardio o incluso, la muerte. Detectar una enfermedad coronaria, antes de que ocurra ninguna consecuencia grave, lo podemos conseguimos, a través de las pruebas cardíacas.
Índice
Qué pruebas se realizan en cardiología
A un paciente que acude a nuestra consulta de cardiología, se le pueden realizar diferentes pruebas, dependiendo de la patología que pueda padecer y según así lo aconseje nuestro cardiólogo.
Las pruebas más utilizadas en los exámenes cardiológicos pueden ser:
- Electrocardiograma:
Se utiliza con la finalidad de medir y de registrar la información de los latidos y el ritmo del corazón. Con esto se facilita el diagnóstico de cualquier tipo de cardiopatía.
- Holter de presión arterial:
Consiste en colocarle al paciente un equipo de medida, durante 24/48 horas. Durante este período la máquina va recogiendo todas las medidas de la presión sanguínea, a medida que el paciente, va desempeñando su actividad diaria habitual, incluso mientras duerme.
- Ecocardiograma doppler pulsado 3D color:
A través de este examen se emiten ondas sonoras para crear una imagen precisa y en movimiento del corazón. La tecnología Doppler determina el flujo sanguíneo. Esta prueba permite el diagnóstico de enfermedades valvulares, miocardiopatías e isquémica.
- Electrocardiograma dinámico Holter de 24 – 48 horas:
Consiste en monitorizar el registro electrocardiográfico en tres canales simultáneos durante 24-48 horas. Se colocan electrodos conectados a un pequeño grabados digital que el paciente lleva consigo. Es muy útil para diagnosticar enfermedades coronarias silenciosas, trastornos de conducción, bloqueos, arritmias crónicas y control de tratamiento.
- Prueba esfuerzo:
La prueba consiste en que el paciente camine en una cinta, incrementándose progresivamente el esfuerzo. Durante la prueba, se realiza un electrocardiograma continuo y controles de parámetros vitales. Es una prueba muy útil porque valora la respuesta del corazón al esfuerzo y ofrece información sobre la circulación coronaria. Si por algún motivo, no hubiese suficiente riego sanguíneo, el corazón se “queja”, quedando reflejado en el examen o provocando dolor en el pecho.
Chequeo cardiológico, cuándo acudir al médico
El corazón puede “avisarnos” de diferentes formas. Las más comunes suelen ser, dolor, falta de aire, palpitaciones y mareos, o incluso con pérdida del conocimiento. Estas situaciones se pueden presentar tanto en reposo como desempeñando alguna actividad física.
La mayoría de las prueban que hacen los cardiólogos, son sencillas de realizar y con ellas se pueden averiguar gran parte de las patologías que pueda presentar nuestro corazón.
Solo tenemos un corazón, y es difícil de reemplazar, por ello es conveniente realizar un chequeo cardiológico con periocidad, individualizado y conforme a las características de cada persona.
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